Bienvenido, gracias por venir a nuestro encuentro, toma asiento, si allí, en tu butaca favorita, bebé un poco de té o de chocolate calentito y juega por un momento con el vapor que dibuja formas como las nubes en el cielo cuando lo soplas, ábrete a imaginar un mundo de posibilidades, sumérgete en el universo mágico de dulces Relatos para tu Alma.
Compartiré historias dirigidas al niño o la niña que habita en ti y al despertar del Ser, como la historia de la estrella de mar y carta a Papito mi Dios. Al terminar de oírlas, por favor escucha lo que tiene tu Alma para contarte y toma nota de ello, siempre hay un mensa.